En el marco de la IX Conferencia Regional sobre la Mujer de América Latina y el Caribe, a celebrarse del 10 al 12 de junio próximos en la Ciudad de México, el Banco Mundial (BM), sugirió a Nicaragua otorgar prioridad a los servicios de salud materno-infantiles, particularmente los relacionados con salud reproductiva y perinatal.
Lo anterior, debido a que las tasas de fecundidad siguen siendo elevadas, en especial entre las adolescentes sin educación, mientras que los avances en la educación son irregulares, lo cual mantiene a esa nación en serios problemas en el cumplimiento del Programa de Acción de la Conferencia Internacional sobre Población y Desarrollo (Cairo +10).
La IX Conferencia Regional es un órgano subsidiario de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), convocado regularmente para identificar las necesidades regionales y subregionales de las mujeres, presentar recomendaciones, realizar evaluaciones de las actividades llevadas a cabo en el cumplimiento de los acuerdos y proporcionar un foro de debate para estas materias.
Los temas sustantivos de la reunión serán pobreza, economía y equidad de género, empoderamiento y desarrollo institucional.
De acuerdo al BM, en el campo nicaragüense más del 25 por ciento de mujeres y hombres hacen todo por sobrevivir con menos de un dólar al día.
En su estudio sobre Pobreza en Nicaragua, señala que pese a ese porcentaje de población viviendo por debajo del umbral de la pobreza, en términos generales en la nación centroamericana ésta disminuyó de 50.3 por ciento a 45.8 por ciento en 2001.
«Los avances obtenidos por Nicaragua son alentadores pero hay mucho por hacer, especialmente en mejorar las condiciones de los pobres en las áreas rurales», dijo Amparo Ballivián, gerente del Banco Mundial para Nicaragua.
Constató que un mayor acceso a las intervenciones de protección social vinculadas a situaciones de crisis puede ayudar a resguardar el bienestar de la población con escasos recursos, romper el círculo vicioso de la pobreza y reducir su vulnerabilidad durante períodos difíciles.
Y es que a pesar de la mejora algunos indicadores sociales no han cambiado desde 1993.
2004/BJ/GV/SM