«La muerte de Digna Ochoa no fue un suicidio, fue asesinada por defender los derechos humanos y con su muerte se intentó intimidar a otros defensores», afirma la carta que será enviada esta semana al presidente de México, Vicente Fox, y al titular de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal, Bernardo Bátiz, firmada por diversas organizaciones defensoras de los derechos individuales de Canadá, Alemania y Suecia.
«Señor presidente (Fox) su administración debe enjuiciar a los responsables de la muerte de Digna», afirman, porque de lo contrario «se perpetuará la percepción en México y el resto del mundo de que su gobierno no actúa con seriedad en la protección de derechos humanos y ambientales», agrega la misiva dirigida al mandatario mexicano.
«Rechazamos las conclusiones de la procuradora especial Margarita Guerra, quien señala que la muerte de la abogada Digna Ochoa y Plácido fue un suicidio. Estamos perplejos del tono y la sustancia de algunas partes del reporte donde parece cuestionarse la integridad y la dignidad de la víctima, al tiempo que minimiza su contribución en la defensa de los derechos humanos en México», señalan las organizaciones que se congregaron el viernes pasado en la Universidad Ryerson, de Toronto, Canadá, para conmemorar tres años de su muerte.
Reabrir el caso
«El constante abuso de los derechos humanos de las mujeres, los indígenas y la comunidad negra en México rutinariamente queda impune. En lugar de conducir investigaciones efectivas, los servicios de procuración de justicia mexicanos frecuentemente culpan a la víctima del crimen en lugar de enjuiciar a los culpables.
«Este patrón de intimidación y violencia terminaría si los defensores de derechos humanos y ambientales fueran libres de hacer su trabajo. Es imperativo que su administración enjuicie a los responsables de la muerte de Ochoa y Plácido», afirman los abogados, ambientalistas, académicos y activistas en el documento.
Los defensores de derechos humanos hicieron un exhorto al presidente de México para que termine con «la cultura de impunidad» y permita que el caso Digna Ochoa sea reabierto.
«La investigación realizada por las autoridades mexicanas ha fallado en recolectar, analizar y guardar evidencias que lleven a otra conclusión en el caso Digna, por eso la comunidad internacional le pide enjuiciar a los culpables de su muerte, en defensa de los derechos de todos los mexicanos», concluye la carta firmada por Lawyer’s Rights Watch Canada, Ontario Coalition Against Poverty, Law Union of Ontario, Common Front Legal Collective, Mujer, en Canadá, y por otras organizaciones de Alemania y Suecia.
Digna «Sandino»
Los defensores de derechos humanos realizaron un homenaje poético-musical a Digna Ochoa, montaron una ofrenda y mostraron diversos performances en su memoria. También se proyectó el documental «Digna», del Canal 6 de Julio, con subtítulos en inglés.
Claudia Huerta, artista mexicana, realizó un «rompecabezas» que resume la cronología de «una muerte anunciada». A esta obra le hace falta una pieza que es la parte de la investigación que está pendiente: enjuiciar a los responsables de su muerte, explicó la artista.
Camilo de las Flores presentó su obra «Sandina» que ubica a la luchadora social en el rango del general Augusto César Sandino, quien es «un poderoso símbolo en su lucha por la dignidad y su auto-determinación. Las mujeres han sido los bastiones de fuerza y dignidad en América Latina, y lo serán hasta nuestra futura emancipación de estas largas cadenas históricas que nos aprisionan.
Sandino y Digna son ejemplares de esa larga lucha por la verdad, la justicia, el respeto a los derechos humanos que deben ser defendidos y honrados por todos».
El homenaje a Digna Ochoa fue organizado por la mexicana Tania Tonantzin, quien dijo que es importante honrar a Digna porque su familia está en la última instancia para resolver el caso.
«Las autoridades continúan diciendo que ella se suicidó, a pesar de que recibió tres disparos; están a punto de dar su fallo y es importante que hagamos presión para que se haga justicia», dijo la artista quien confió en que la presión internacional puede servir para que se reabra el caso y que se condene a los asesinos de Digna Ochoa.
«Lo que debemos hacer es presionar también al gobierno canadiense, porque de nada sirve que venga aquí el presidente Fox y diga que todo en México está bien», dijo Barbara William, activista canadiense quien trabaja por los derechos de las mujeres chiapanecas.
2004/II/LR
