Organizaciones no gubernamentales iniciaron este miércoles una campaña por la preliberación de Nadia Ernestina Zepeda Molina, la joven presa desde 2003 en el Reclusorio Femenil Oriente tras resistirse a ser violada por policías capitalinos que la acusaron de comercializar droga.
La demanda de preliberación se basa en el hecho de que Nadia ya cumplió 60 por ciento de la sentencia de cinco años y 100 días de prisión que se le impuso y tiene derecho a ese beneficio, aunque ello no implica que renuncia a demostrar su inocencia, afirmaron su madre, Carmen Molina Terreros, y representantes de las ONG que impulsan la campaña.
En enero de 2003, Nadia Zepeda fue detenida con lujo de violencia por elementos de la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal, que pretendieron violarla y, al no lograr su objetivo, la consignaron bajo el cargo de haber sido sorprendida vendiendo droga.
Olga Sánchez Contreras, la juez que la sentenció por delitos contra la salud en la modalidad de comercialización, no tomó en cuenta las denuncias de Nadia, que acusó a sus captores de haber intentado violarla y de sembrarle 193 «grapas» de cocaína que aseguraron haberle encontrado al detenerla.
Laura Pérez Escobedo, abogada del área jurídica del Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez (Pro DH), informó también que se decidió promover la campaña porque se han agotado todos los recursos jurídicos para revocar la sentencia impuesta a la joven, una vez que se le negó el amparo interpuesto contra la condena.
Confió en que se podrá demostrar la culpabilidad de tres de los cerca de 20 policías que intervinieron en la detención de Nadia, y que están siendo investigados por abuso de autoridad y por abuso sexual y violación en dos averiguaciones previas que todavía no se consignan ante una autoridad judicial.
Con ello, consideró, se podría tener una prueba superviniente de que la joven fue injustamente encarcelada y procesada y promover un reconocimiento de inocencia pero, mientras tanto, se decidió lanzar la campaña por su liberación.
Su madre, Carmen Molina, lamentó que pese a las múltiples irregularidades registradas tanto en la detención de su hija como en el proceso que se le siguió, se le haya negado el amparo, pero confió en que, con la campaña, pueda obtener su libertad.
Nadia fue detenida por el comando especial Sagitario de la policía capitalina, cuando salía con dos amigos de un café internet. A los tres días ya estaba en el Reclusorio Femenil Oriente incomunicada y acusada de delitos contra la salud, mientras los jóvenes que iban con ella al ser detenida fueron liberados unas semanas después.
En un comunicado, las organizaciones que impulsan su liberación, afirmaron que el caso de Nadia es un ejemplo de la discriminación por razones de género, así como de las lagunas existentes en el sistema de procuración de justicia, la fabricación de delitos y la ineficacia de los procesos de investigación judicial.
05/LG/GM
