Discriminación, exclusión, explotación y acoso sexual son los factores característicos que sufren las trabajadoras de casa particular, en su mayoría indígenas y adolescentes, afirmó Maritza Velásquez, integrante del Centro de Apoyo para las Trabajadoras de Casa Particular (Centracap).
Velásquez señaló que a pesar de los esfuerzos que varias entidades femeninas han hecho por erradicar la situación de precariedad y vulnerabilidad de las mujeres que se dedican a estas labores, no hay cambios significativos desde el tiempo de la colonia.
Según la entrevistada, Centracap ha presentado varias iniciativas al Congreso de la República, que tienen como objetivo mejorar las condiciones de trabajo de este sector, pero los y las legisladoras no las han aprobado y han quedado en el olvido.
La representante de la entidad subrayó que continúan luchando por la erradicación de los flagelos que afectan a las trabajadoras, hace poco presentaron otras iniciativas que fueron apoyadas por la Comisión de la Mujer del Legislativo, las cuales se incluyeron en la agenda del Parlamento de las Mujeres.
Velásquez resaltó que las propuestas presentadas al Congreso son: la aprobación de la Ley de la Trabajadoras de Casa Particular, en la que se contemplan las jornadas de trabajo y el salario mínimo; la inclusión de este sector en el seguro social y la tipificación del acoso sexual.
Centracap es una entidad que tiene como objetivo promover el bienestar individual y colectivo de estas trabajadoras, así como mejorar sus condiciones socio-económicas y políticas, además de coadyuvar a su desarrollo integral.
2005/SJ