El Partido Socialista refrendó su compromiso histórico con la educación sexual y reproductiva de las y los uruguayos, luego de que el pasado 5 de mayo el Senado rechazó por 17 votos en contra y 13 a favor, el proyecto de Ley de Defensa de la Salud Reproductiva.
Dicho instituto político recordó que sólo compete a la población decidir sobre su sexualidad con absoluta libertad, accediendo a métodos anticonceptivos que elija, regulando su fecundidad y trayendo al mundo los hijos que realmente quiere y desea.
Los socialistas uruguayos se pronunciaron además por trabajar como hasta ahora, para que el embarazo deseado sea una opción y «para que un día en nuestro país gane la tolerancia y no se discrimine y criminalice a aquellas que elijan voluntariamente la interrupción de su embarazo».
El sector político encuentrista destacó la coherencia y compromiso de sus diputadas y diputados, senadoras y senadores, que asumieron la defensa de la ley dejando de lado la hipocresía social. Saludó además a las organizaciones agrupadas en la Coordinación Nacional de Organizaciones por la defensa de la iniciativa.
Lo anterior, «porque con su calificado trabajo de esclarecimiento y de difusión del tema, permitieron dar en la opinión pública un salto cualitativo muy importante en la comprensión de tan delicado tema, que es fundamental para el desarrollo de la democracia y el ejercicio real de la auténtica ciudadanía».
DENUNCIA POR INJERENCIA
La senadora socialista Mónica Xavier pidió al canciller Didier Opertti que analice si hay mérito para una acción diplomática contra seis parlamentarios estadounidenses que enviaron una nota a sus pares uruguayas y uruguayos solicitando no sólo el rechazo del proyecto de Ley de Defensa de la Salud Reproductiva, sino también que «no habilitaran una consulta popular por este tema».
En la misiva, fechada el 30 de abril, los congresistas Christopher Smith, Todd Akin, Jo Ann Davis, Mike Pence, Steven King y Joseph Pitts, señalaban textualmente: «Le insto a que continúe votando en contra de esta ley».
EL PULSO DE LA CALLE
La concentración de cientos de personas en la explanada y alrededores del Palacio Legislativo el pasado 4 de mayo, mientras en el recinto del Senado se votaba el proyecto de Ley de Defensa de la Salud Reproductiva, permitió acercarse al pulso de la calle.
Carla Batista vino desde Recife, en representación S.O.S. Cuerpo, Instituto Feminista para la democracia y articulación de mujeres brasileñas: «Nosotras estamos acá porque es una cuestión de derechos humanos de todas las mujeres».
«Vivimos este proceso junto a las uruguayas, y creemos que para todas las mujeres de América Latina es un avance muy grande que esta ley haya llegado al Senado. Lo que sucede aquí nos aproxima a la posibilidad de que se discuta en mi país, donde es muy difícil el acceso a los métodos anticonceptivos. En el gobierno del PT se hace posible que el tema se convierta en algo más concreto», resumió.
*Directora del suplemento feminista La República de las Mujeres. La interior información será publicada en esta edición el próximo domingo.
2004/GV/SM