El Observatorio Ciudadano contra la Violencia hacia las Mujeres es un grupo político de presión independiente y no partidista que acaba de nacer con el objetivo de dar a conocer a la opinión pública la situación social de las mujeres en México y, en particular, la manera en que las afecta la violencia.
«Desde el Observatorio estamos llamando a las mujeres hacia una acción común a favor de nuestros derechos», dijo la abogada Patricia Olamendi, integrante del Observatorio, en entrevista con Cimacnoticias.
Con motivo de la inminente rectificación por parte de la Suprema Corte de Justicia de la denominada tesis de 1994, la cual no consideraba delito la violación conyugal, el Observatorio ha elaborado un documento que analiza y denuncia «la grave y sistemática violación de los derechos humanos de las mujeres en México», explica.
La presentación de este documento supone el arranque del Observatorio, una iniciativa a la que la abogada espera se sume la ciudadanía. «Este es un primer impulso que estamos desarrollando mujeres de diferentes espacios políticos. Queremos que los ciudadanos en el estado o en el municipio en el que estén hagan este mismo ejercicio: analizar qué está bien o qué no. Es algo que se conoce como rendición de cuentas».
Para la abogada, el sistema judicial mexicano no escapa a la rendición de cuentas; Olamendi hizo un llamado de alerta ante sus graves deficiencias en materia de violencia sexual. A pesar de que México ratificó los tratados y convenios internacionales que reconocen que este tipo de violencia es una violación de los derechos humanos, la jurista denuncia que «la actuación de los jueces deja mucho qué desear».
Olamendi también destaca que gracias a las reivindicaciones de las mujeres y de organizaciones de diversos signos políticos se han alcanzado reformas legislativas en favor de los derechos de las mujeres. Aun así, «nos encontramos básicamente con un problema de prejuicios» y, como consecuencia, «sigue sin aplicarse lo que se ha construido en el país».
Como ejemplo de las deficiencias, señala que aunque en 1997 la reforma del Código Penal del Distrito Federal estableció la violación en el matrimonio, pero no todos los códigos se modificaron; además, la tesis de 1994 siguió orientando las decisiones de algunos jueces.
«En México la violación es uno de los delitos con menor índice de denuncia, pero para qué lo vas a denunciar si te agraden todo el tiempo», subraya en referencia a los vacíos legislativos y de política pública en relación con la atención y prevención de esta problemática.
Según la Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares 2003, 46.6 por ciento de las mujeres mexicanas sufren algún tipo de violencia -emocional, física, sexual o económica-. Olamendi considera insuficientes «que en todo México haya menos de 20 albergues para atender a ese porcentaje en un país de 100 millones de habitantes, que es la décima economía del mundo y que tiene más de 50 millones de mujeres».
A través de la vigilancia y la denuncia, el Observatorio presionará, a través del ejercicio de la ciudadanía, para que exista una auténtica voluntad política para prevenir y erradicar todo tipo de violencia contra las mujeres. «Es una forma de protestar», resume la abogada.
05/ER/YT
