Las obreras de la industria maquiladora de Matamoros son víctimas de la discriminación laboral y de la cultura del machismo, revela un estudio realizado en la ciudad fronteriza; la investigación señala que los puestos ejecutivos de las empresas son acaparados por hombres, mientras que las mujeres, quienes constituyen un amplio porcentaje de la mano de obra, generalmente son colocadas como operadoras.
De acuerdo con el estudio, encuestas y entrevistas con obreras y obreros de la industria maquiladora de esta ciudad fronteriza permitieron también detectar que existe discriminación en cuanto a la diferencia de salarios entre hombres y mujeres.
El investigador austriaco Markus Spitzer, quien realizó trabajo de campo durante un mes en los centros de trabajo de la industria maquiladora para la tesis doctoral que presentará con el estudio denominado Efectos de la crisis maquiladora 2002-2004, reveló que su investigación detectó un machismo muy fuerte que se refleja en el hecho de que los hombres ocupan puestos más altos en estas empresas y, obviamente, mejor pagados.
No obstante, las mujeres siempre han constituido un amplio porcentaje de la mano de obra de la industria maquiladora; de acuerdo con cifras oficiales del gobierno del estado, la población femenina constituye 55 por ciento de la mano de obra y, en algunos municipios de la frontera, la cifra se rebasa.
Según activistas y organizaciones de los trabajadores, los empleadores buscan mujeres porque las consideran más diligentes y trabajadoras y creen que sus manos están más acostumbradas a ejecutar movimientos repetitivos necesarios para memorizar el trabajo de montaje; sin embargo, son ellas quienes están menos informadas sobre sus derechos.
05/DC/YT