Legisladoras y legisladores de España, México y Guatemala emitieron en esta capital la Declaración de Madrid, en la que se comprometieron a construir desde el Poder Legislativo un marco jurídico, tanto en sus respectivos países como en los ámbitos regional e internacional, que permita prevenir, atender, sancionar y erradicar la violencia contra las mujeres.
Reunidos en el Tercer Diálogo Internacional Interparlamentario sobre Violencia Feminicida, que se desarrolló los días 15 y 16 de septiembre en el Congreso de los Diputados de esta ciudad, las y los legisladores reafirmaron el Pacto de México y la Declaración de Guatemala suscritos en los dos encuentros anteriores.
El documento es resultado del diálogo que impulsaron las Comisiones Especiales de Seguimiento a los Feminicidios de la Cámara de Diputados y el Senado mexicanos. Las y los parlamentarios recomendaron impulsar la acción regional e internacional de sus respectivos gobiernos para crear y fortalecer un sistema jurídico internacional -tratados, resoluciones y declaraciones- que erradique la violencia contra las mujeres; en especial, la violencia feminicida.
Acordaron también impulsar la ampliación de la red interparlamentaria por el derecho a una vida sin violencia contra las mujeres en todos los espacios nacionales e internacionales; también, luchar por eliminar la desigualdad y la discriminación sistemática en contra de las mujeres, y erradicar la impunidad de la violencia feminicida en los países en los que exista.
Al reconocer que la violencia feminicida tiene expresiones concretas, analizadas en cada uno de los tres diálogos realizados, los parlamentarios manifestaron que donde prevalecen el estado de derecho, la democracia y la igualdad, y se avanza en la vigencia de los derechos humanos de las mujeres, se está en vías de erradicar la violencia en contra de ellas.
Las y los asistentes al encuentro coincidieron en que la violencia feminicida es la forma extrema de la violencia de género contra las mujeres; que atenta contra sus derechos humanos, especialmente los derechos a la vida, la seguridad y el acceso a la justicia, y limita el desarrollo y la paz en las sociedades.
Por ello, se comprometieron a fortalecer la coordinación y cooperación técnica en materia legislativa, mediante el intercambio de experiencias tanto entre los países participantes en la Red Interparlamentaria como en el ámbito internacional, que permitan optimizar el trabajo parlamentario.
Acordaron, asimismo, promover y fortalecer los mecanismos de seguimiento para conocer las necesidades y los avances de los compromisos, los acuerdos y las recomendaciones nacionales e internacionales para erradicar la violencia contra las mujeres y en particular la violencia feminicida.
En la Declaración de Madrid, las y los legisladores recomiendan consolidar las medidas legales nacionales que garantizan la igualdad, la libertad y la vida de las mujeres a partir de los principios de no discriminación y equidad y con el impulso de las instancias internacionales.
Proponen, además, crear medidas de prevención, atención y sanción de manera que a las violaciones específicas de los derechos humanos de las mujeres se contrapongan acciones efectivas que lleven a erradicar la violencia contra las mujeres en sus respectivos Estados.
Otra de las recomendaciones contenidas en el documento es fortalecer alianzas con las y los parlamentarios de los países iberoamericanos para lograr los objetivos acordados, así como con las y los integrantes de los otros poderes del Estado y de la sociedad civil, para sustentar y dar seguimiento a las acciones parlamentarias desarrolladas para erradicar la violencia contra las mujeres.
*Periodista mexicana
O5/LG/YT
