La posición conservadora del Vaticano y de la actual administración de Estados Unidos fueron derrotadas en la reunión del Comité de Población y Desarrollo de la Comisión Económica para América Latina (Cepal), que se clausuró hoy en la capital chilena.
Así lo destacó la directora de la organización Católicas por el Derecho a Decidir de México (CDD), María Consuelo Mejía, al constatar el apoyo de los países de América Latina y el Caribe al llamado Programa de Acción sobre Población y Desarrollo de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
Mejía destacó que todos los países de América Latina y el Caribe presentes en la reunión reafirmaron el programa de Acción de El Cairo y del Programa de Acción Regional, lo que constituye, aseguró, «un estruendoso fracaso» de las políticas vaticanas en la región.
La directora de CDD también indicó que la posición de la jerarquía de la iglesia católica fue representada en la reunión por la delegación de Estados Unidos. «Es interesante ver que de la misma manera que los católicos y católicas reclaman autonomía para sus decisiones morales, los países latinoamericanos reclaman autonomía para sus decisiones en política pública», dijo.
Asimismo, subrayó que según una encuesta realizada en la población católica de tres países de América Latina (Colombia, Bolivia y México) más de 70 por ciento no está de acuerdo con las posiciones de El Vaticano sobre el matrimonio y divorcio.
Otros temas en que tampoco hay coincidencia entre la posición de los feligreses y las jerarquías conservadoras, aseguró, es en relación al uso de los anticonceptivos, del condón, la participación de la iglesia en la política y la misión de la institución religiosa.
La población católica, según las encuestas realizadas en Bolivia, Colombia y México, reclama autonomía para tomar decisiones morales sobre el uso de anticonceptivos, matrimonio y divorcio.
Nos encontramos ante lo que los investigadores denominan una revolución silenciosa. El pueblo católico no quiere que el Vaticano y las jerarquías locales sigan inmiscuyéndose en su vida privada. Esto es lo que resalta en esta reunión de la Cepal, que marca el inicio de la evaluación en la región de América Latina de los 10 años de instrumentación del Programa de Acción de El Cairo», concluyó Mejía.
Cabe mencionar que el documento conocido como Programa de Acción de El Cairo de la tercera Conferencia Internacional sobre Población y Desarrollo, realizada en esa capital en 1994, contempla los derechos reproductivos, el respeto a los derechos humanos y lucha contra la pobreza.
El documento establece que deben atenderse los problemas asociados al aborto inseguro y que se deben revisar las leyes que penalizan a las mujeres. El Vaticano y los países musulmanes tuvieron un papel de obstaculización de este proceso de la Conferencia de El Cairo.
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