La policía del estado de Chiapas detuvo ayer a un médico y a una enfermera del Hospital de Comitán por su presunta responsabilidad en la muerte de una menor embarazada y de su bebé.
Este lunes Rosa García, una adolescente de 16 años, embarazada, murió en una sala de ese centro hospitalario después de que supuestamente se le negó atención médica, pese a que había pedido ayuda por más de nueve horas.
Fuentes de la Procuraduría de Justicia del Estado explicaron que el médico y la enfermera fueron detenidos como probables responsables de los delitos de homicidio, responsabilidad médica y técnica y otros que resulten de la investigación.
Las fuentes indicaron que tras un análisis de la necropsia aplicada al cadáver de la joven se determinó el ejercicio de la acción penal en contra del ginecólogo Julio César Castro y la enfermera Alicia Martínez, quienes no atendieron a la joven en el parto, lo que provocó su muerte y la del bebé.
Agregaron que el análisis de la necropsia demostró que la joven murió por una intensa hemorragia y el bebé por falta de oxígeno debido a que no se realizó una cesárea urgente que requerían las condiciones del parto.
Este martes los padres de la joven muerta presentaron una denuncia por negligencia médica ante la fiscalía de esa ciudad y solicitarán la intervención de la Comisión Estatal de Derechos Humanos.
El padre de la menor dijo que incluso el personal del hospital le ofreció cubrir los costos del sepelio a cambio de que no presentaran la denuncia ante las autoridades.
Hace un año, en este hospital murieron más de 30 recién nacidos por diversas causas, muertes que nunca fueron aclaradas totalmente.
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