Representantes sindicales coincidieron en que la iniciativa de reformas a la Ley Federal del Trabajo pactada entre el Congreso del Trabajo y el Consejo Coordinador Empresarial deja sin resolver el hostigamiento sexual y la discriminación hacia las mujeres en el ámbito laboral.
Rosario Ortiz, del Sindicato de Telefonistas de la República Mexicana (STRM), consideró que la iniciativa retoma de manera parcial esos dos problemas, pero no establece mecanismos para abatirlos ni procedimientos para sancionarlos, imposibilitando además que las trabajadoras los denuncien.
Inés González, de la Federación de Sindicatos Bancarios, descalificó la propuesta, conocida como «iniciativa Abascal» en referencia al secretario del Trabajo y Previsión Social, por tocar de manera superficial esos problemas de las mujeres en el ámbito laboral, así como el despido por embarazo.
Coincidió con Rosario Ortiz en que la propuesta de reforma laboral dada a conocer el martes carece de claridad en cuanto al hostigamiento sexual y no establece responsabilidad para el empleador ni sanciones para el hostigador.
Además, añadió, no se involucra a los sindicatos ni se obliga a los empleadores a establecer códigos de conducta en los centros laborales que permitan detectar y erradicar problemas tan complejos como el acoso sexual.
En relación con el despido por embarazo, opinó que la propuesta deja el campo libre a que los empleadores busquen otras razones para despedir a las trabajadoras, especialmente cuando estén embarazadas.
En síntesis, consideró que la propuesta es la que se esperaba y que deja fuera las demandas de las mujeres, en forma contraria a lo afirmado por el secretario del Trabajo, Carlos Abascal Carranza, quien aseguró que la iniciativa protege a las trabajadoras del país.
Por su parte, la presidenta de la Red de Mujeres Sindicalistas, Margarita de la Cruz, señaló también que la propuesta no establece mecanismos para denunciar las violaciones a los derechos laborales de las mujeres ni obliga a los patrones a cumplir con la normatividad.
Tampoco establece castigos para los hostigadores, que en su opinión podrían ir desde una llamada de atención, la suspensión de días de trabajo y hasta el despido.
Hizo ver que el hostigamiento sexual, como una forma del ejercicio del poder, torna intolerable el ambiente de trabajo de las mujeres, particularmente entre las no sindicalizadas, quienes carecen de instrumentos para su defensa.
Dijo que de ser aprobada, la «iniciativa Abascal» tendrá un impacto negativo para los y las trabajadoras ante la debilidad sindical imperante y porque los derechos colectivos quedarán excluidos de la ley laboral.
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